La terapia con orthokine es una terapia autóloga, en donde se utiliza la sangre extraída del propio paciente para aliviar la clínica dolorosa e inflamatoria que caracterizan a los procesos artrósicos.
La artrosis de cadera es junto con la de rodilla una de las causas más frecuentes de la limitación de la capacidad de la deambulación en el adulto. Cuando aparece en la cadera los síntomas suelen ser dolor en ingle o muslo que aumenta al caminar y al subir escaleras, y dificultad para atarse los zapatos o ponerse los calcetines e incluso para sentarse en sofás o sillas bajas.
Con la terapia de Orthokine conseguimos aliviar estos síntomas en aquellos pacientes que deben o quieren esperar al tratamiento definitivo consistente en la intervención quirúrgica para colocar una prótesis, en pacientes de riesgo en los que no es aconsejable dicha intervención, o en todos aquellos que desean mejorar calidad de vida mientras esperan.
Esta terapia consiste en extraer la sangre del paciente y procesarla de manera especial mediante una incubación durante varias horas a temperatura corporal. Durante este tiempo, las células sanguíneas son estimuladas mediante un complejo mecanismo para producir altos niveles de concentración de factores de crecimiento y moléculas que bloquean los factores inflamatorios que aparecen en la articulación, como las interleukinas, para posteriormente centrifugar la muestra, separar la parte sólida del suero endógeno y finalmente inyectarlo en la articulación afectada.
En el caso de la articulación de la cadera, el procedimiento puede realizarse bajo control radioscópico, ecográfico o con las referencias anatómicas que utilizamos en ICONICA Servicios Médicos para asegurar que el suero se inyecta dentro de la articulación.